Desconexión: OMS advierte que la Emergencia del Covid Continúa y Chile Anuncia su Fin

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Ayer, el mismo día en que el Presidente Gabriel Boric anunció "el término de la Emergencia Sanitaria en Septiembre" (mencionado al pasar en su discurso sobre las nuevas medidas de apoyo económico) la OMS publicó la última resolución de su Comité de Emergencias, aclarando al mundo que la pandemia continúa siendo una emergencia de importancia internacional. 

Y se está complicando, señaló, gracias a que la desconexión del riesgo y consecuente abandono de la prevención en los Estados se está presionando al virus, aumentando la probabilidad de que surjan mutaciones más peligrosas.

"La pandemia de COVID-19 todavía cumple con los criterios de un evento extraordinario que continúa afectando negativamente a la salud de la población mundial, y la aparición y propagación internacional de nuevas variantes del SARS-CoV-2 pueden presentar un impacto aún mayor en la salud", fue el acuerdo unánime de la 12ª reunión del Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional de la OMS.

Para el Director Ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias Michael J. Ryan es preocupante la actual situación epidemiológica mundial de COVID-19. "Los casos de COVID-19 notificados a la OMS habían aumentado un 30 % en las últimas dos semanas, impulsados en gran medida por Omicron BA.4, BA.5 y otros linajes descendentes y el levantamiento de las medidas sociales y de salud pública (PHSM)". 

El Comité fue inusualmente crítico con los estados miembros que abandonaron las políticas de prevención, trazabilidad y vigilancia; con una comunicación de riesgos deficiente y con baja participación de la comunidad en las medidas de salud pública, acusando "una desconexión en la percepción del riesgo planteado por el COVID-19 entre las comunidades científicas, los líderes políticos y el público en general".

"Es posible que no se entiendan completamente las implicaciones de una pandemia causada por un nuevo virus respiratorio. En consecuencia, dada la forma actual y la dinámica impredecible de la pandemia de COVID-19, el Comité hizo hincapié en la necesidad de reducir la transmisión del virus SARS-CoV-2. Esto requiere el uso responsable, consistente y continuo de medidas de protección a nivel individual, en beneficio de las comunidades en su conjunto; así como los ajustes continuos del PHSM en toda la comunidad, para superar los enfoques binarios de 'todo o nada'". 

Considerando que en este momento la pandemia tiene desafíos adicionales como la "disminución de la protección natural y derivada de las vacunas" el Comité afirma que se perdió "la capacidad de evaluar el impacto de las variantes en la transmisión, las características de la enfermedad o las contramedidas, incluidos el diagnóstico, la terapéutica y las vacunas, se está volviendo cada vez más difícil como resultado de la insuficiencia de la vigilancia actual, incluidas las reducciones en las pruebas y la secuenciación genómica". 

La fuerte reducción del testeo, cobertura y calidad de la vigilancia "impide las evaluaciones de las variantes actuales circulantes y emergentes del virus, incluida la generación y el análisis de datos fenotípicos. Lo anterior se traduce en la creciente incapacidad de interpretar las tendencias en la transmisión y, en consecuencia, para informar adecuadamente los ajustes de las medidas sociales y de salud pública".

El Comité de emergencias de la OMS advirtió que el SARS-CoV-2 sigue siendo impredecible y continúa evolucionando, a través del contagio sostenido entre humanos y la transmisión en animales, y que gracias a la falta de la adopción de medidas para reducir la transmisión, se está ejerciendo una "presión selectiva sobre el virus, lo que aumenta la probabilidad de que surjan nuevas variantes más adecuadas, con diferentes grados de virulencia, transmisibilidad".

A diferencia de lo que ocurre en Chile, donde las medidas se toman en función casi exclusiva del nivel de vacunación, para la OMS se tienen que considerar también las "estimaciones de prevalencia de la enfermedad y la protección de la población contra la infección, así como de las capacidades del sistema de salud local (ya cuestionado, entre otras cosas, por la escasez de personal debido al agotamiento relacionado con COVID-19)".

En el actual escenario la OMS llamó a integrar los resultados del autotesteo, que han disminuido artificialmente el número de casos, y disponer de pruebas precisas y oportunas. También pidió vigilancia centinela, de aguas residuales y sondeo detallado de la secuencia del genoma profundo, en forma rápida y ampliada a otras enfermedades respiratorias.

 "El Comité reconoció la necesidad de acelerar la integración de la vigilancia de la COVID-19 en los sistemas de rutina, por ejemplo, integrando la vigilancia de la COVID-19 con la vigilancia de otros patógenos respiratorios

Enfocado claramente en virus de transmisión aérea, llamó a promover el uso de "medidas efectivas" para reducir los contagios tales como el uso de mascarillas bien ajustadas, evitar espacios con mala ventilación, lugares abarrotados y "mejorar e invertir en la ventilación de los espacios interiores".

Respecto a la falta de una comunicación de riesgo adecuada y las "percepciones divergentes de riesgo" entre las comunidades científicas, los líderes políticos y el público en general el Comité llamó a contrarrestar de forma proactiva la desinformación y a incluir a las comunidades en la toma de decisiones. 

"Los Estados partes deben explicar de manera clara y transparente los cambios en la aplicación de medidas de protección, así como las incertidumbres relacionadas con la evolución del virus y los posibles escenarios relacionados. Los esfuerzos de comunicación de riesgos y participación comunitaria solo pueden ser efectivos para alterar el curso de los comportamientos individuales actuales si se basan en estrategias, políticas y voluntad política coherentes para gestionar la pandemia de COVID-19, y los riesgos para la salud pública concurrentes, dentro de los Estados partes y entre ellos"

Precisamente ayer dos reconocidos analistas de datos de la pandemia, Ernesto Laval y Rafael González, manifestaron su pena y decepción en redes ante la inadecuada comunicación de riesgo de la ministra de Salud Begoña Yarza, que señaló que este año el número de casos "se disocia del número de fallecidos" dando a entender a la ciudadanía que el peligro más grave del Covid-19 se ha superado. 

Ambos analistas compartieron los datos que indican que la supuesta disociación es falsa, que actualmente sí existe aumento de decesos Covid-19 y que la declaración de la ministra ocurre en la misma jornada en que en que el DEIS publicó el exceso de fallecidos, mostrando que desde octubre de 2021 las cifras de exceso superan a las muertes oficiales Covid-19.

Es decir, no sólo existe desconexión entre el  Ministerio de Salud y la Organización Mundial de la Salud, sino también con sus propios datos. 


1 comentarios:

  1. Esto es culpa de la relajación de las medidas de distanciamiento, uso de mascarillas y de los antivacunas.

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