The Lancet: Si se Relajan Medidas Preventivas Vacunación será Insuficiente para detener el COVID-19

UCI, Cuarentena, The Lancet



La vacunación será insuficiente para detener los contagios y la mortalidad por COVID-19 si se relajan las políticas de contención y confinamiento social, aún si se cuenta con vacunas de alto porcentaje de efectividad,  advierte un reciente estudio publicado por la revista científica The Lancet .


El informe Vacunación e intervenciones no farmacéuticas para COVID-19: un estudio de modelado matemático presenta, en distintos escenarios de vacunación, lo que ocurriría si, tras la inoculación masiva y completa de la vacuna (2 dosis) los países relajan sus políticas de prevención y control social de la pandemia.


Las políticas de salud pública referidas en el estudio son las Intervenciones No Farmacéuticas, o NPI por su sigla en inglés, e incluyen desde estrategias de contención como el Testeo, Trazabilidad y Aislamiento (TTA), lavado de manos, uso de mascarillas y distanciamiento social; hasta las medidas de confinamiento, reclusión y vigilancia de la población a través de cuarentenas o restricciones de contacto social.


Todas estas intervenciones han demostrado ser necesarias y efectivas para contener el virus SARS-CoV-2. Países que optaron por una fuerte estrategia preventiva- como Nueva Zelanda - exhiben bajas tasas de contagio y mortalidad. Por el contrario, países con menor contención social y que eligieron la inmunidad de rebaño o contagio progresivo,  tienen mayor descontrol en sus indicadores, como Chile que está cerca de alcanzar los 30 mil fallecidos y se encuentra entre las naciones con más muertes por millón de habitantes.


En todos los modelamientos realizados,  las Intervenciones No Farmacéuticas deben mantenerse, aún cuando gran parte de la población haya recibido las dos dosis de una vacuna que ofrezca 88% de efectividad , y el programa de vacunación sea masivo para la población en general, como para distintos grupos etarios o de edades susceptibles a vacunar.


Según el estudio, en el escenario más optimista, en que:

  • La vacuna evite el 85% de las infecciones
  • El R estimado sea de 1,58 
  • Todos los adultos susceptibles de vacunar han recibido las 2 dosis 
  • La proporción de vacunados por grupo etario es de 95% en mayores de 80 años, 85% en personas de 50 a 79 años y de 75% en el grupo de 18 a 49 años


Sin las medidas NPI una vez que se complete la vacunación el virus provocaría oleadas de infección y muertes que alcanzarían 21.400 fallecimientos en Gran Bretaña, cifra que aumentaría más de 4 veces (96.700 muertes) si la vacuna sólo previene el 60% de las infecciones.


Para todos los escenarios de vacunación que investigamos, nuestras predicciones destacan los riesgos asociados con la relajación temprana o rápida de los NPI”, advierte el estudio.


Para los investigadores, la vacunación contra el SARS-CoV-2 presenta múltiples desafíos únicos, que no se encuentran en otros programas de vacunación. Por ejemplo, explican, la vacunación contra la  influenza estacional es proactiva (comienza antes de que surjan muchos casos),  la temporada de influenza es relativamente corta y su tasa de reproducción es más baja que la del SARS-CoV-2.


Por el contrario, para el SARS-CoV-2, existe una carrera entre la infección y la vacunación; la infección puede crecer exponencialmente, mientras que las tasas de vacunación están intrínsecamente restringidas por el suministro y la logística. Sin embargo, la tasa de infección puede reducirse mediante diversas intervenciones no farmacéuticas (NPI), mientras que una vacuna se dirige a los sectores de la población en los que tendrá el mayor impacto.


Por lo tanto, el futuro del control del SARS-CoV-2 depende, de formas complejas no lineales, de la prevalencia inicial de la infección, la fuerza de los NPI y la tasa de crecimiento o descomposición de la infección, la velocidad con la que se puede administrar la vacuna implementado, la focalización y la penetración de la vacuna, y las características de la vacuna. 


Las incertidumbres y las interacciones entre estos componentes requieren el uso de modelos matemáticos para cuantificar y optimizar los efectos de la vacunación en la pandemia de COVID-19".


Metodología


El 88% de efectividad de la vacuna fue calculado sobre la base de efectividad de las vacunas Pfizer-BioNTech y Oxford-AstraZeneca, las más aplicadas hasta ahora en Reino Unido, desde que comenzó el proceso de vacunación, el 8 de diciembre de 2020.


De acuerdo al plan de vacunación se establecieron porcentajes de inoculación en cada grupo etario y sobre ello, en un contexto donde se relajan las medidas NPI, se proyectó la dinámica de infección:  casos diarios, hospitalizaciones y muertes  ocurridas en Reino Unido desde febrero de 2020.


Además, el R efectivo (número de personas posibles que se infectan por cada persona contagiada) se calculó a partir de la tasa prevista de infección, asumiendo la liberación completa de los NPI.


El estudio completo se puede ver aquí:



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Escrito por Lucía Escobar

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